Hoy te hablaré de la respiración consciente. Respirar es una acción necesaria para que nuestro cuerpo se oxigene y funcione. La respiración es un proceso indispensable para la vida, ya que suministra oxígeno constantemente a todas las células que forman nuestro organismo. Cuando estamos en reposo lo hacemos entre 12 y 18 veces por minuto y de forma automática. Nadie nos ha enseñado. Es lo primero que hacemos al nacer y lo último que haremos. Respirar es vivir y aunque lo hagamos involuntariamente, la respiración, además de ocuparse de mantenernos vivos, interviene de diferentes maneras en nuestra vida diaria y cambia con nuestros estados emocionales.
En la rutina de cada día no percibimos muchas cosas que hacemos continuamente sin ser conscientes. Como ya apunté, una de ellas es la de respirar. Hacemos que nuestra respiración sea automática, una situación mecánica, la cual practicamos sin consciencia alguna.
Día tras día nos encontramos en momentos de un alto nivel de estrés debido a la vida rápida que nos hace llevar esta sociedad en la que vivimos. Con un minuto de pausa, siendo conscientes de nuestra respiración, podríamos conseguir experimentar una sensación de relajación que nos ayudaría a sentirnos mucho mejor.
La respiración consciente es la clave para unir nuestro cuerpo y nuestra mente. Es el puente para llevar el oxígeno a todas las partes de nuestro cuerpo, pero también lo es para relajar nuestro organismo y a su vez manejar nuestras emociones.
Si buscas un mayor control y eliminación de la sensación de estrés y de ansiedad, esta técnica es para ti, ya que a través de la respiración consciente se controla la activación psicofisiológica que alimenta a esas desagradables sensaciones.
Esta técnica actúa en nuestro cuerpo al igual que lo hacen los calmantes, generándonos una sensación placentera, de calma y tranquilidad.
Qué hacer para conseguir respirar de forma consciente:
Es relativamente sencillo. Se hace controlando el ritmo de la respiración. Has de respirar de forma pausada y profunda, concentrando tu atención en cómo tu cuerpo se oxigena y revitaliza.
Pero no es tan fácil como suena, ya que debes entrenarte a ti y a tu cuerpo. Para conseguir sus efectos debes empezar realizando una respiración diafragmática. Ésta no es la clase de respiración simple que solemos practicar. Normalmente el aire no llega hasta lo más bajo de los pulmones, sino que se queda en la superficie (en la zona del pecho), mientras que respirando a través del diafragma lograremos llevar el aire, el oxígeno, hasta lo más profundo de nuestros pulmones. Aquí puedes leer más sobre cómo practicar la respiración diafragmática.
Si no tienes muy claro como empezar, te animo a que te descargues una app para que empieces a practicar tu respiración de una forma más consciente. Hay muchísimas opciones tanto para android como para IOS. O también te animo a utilizar el podcast que enlazo al final de esta página.
Con esta práctica conseguirás dos cosas:
-La primera: es que podrás modular tus emociones através del simple ejercicio que es respirar. La respiración consciente activa sustancias y mecanismos opuestos a las respuestas de estrés, produciendo así una agradable sensación de relajación y tranquilidad en la persona. Una vez que comenzamos a dedicar unos minutos al día a las técnicas de respiración consciente, notamos cómo mejora en gran medida nuestra calidad de vida.
-La segunda: es que a fuerza de practicarla y hacerte consciente de cómo es tu respiración se te hará más fácil reconocer tus emociones si tu respiración está alterada. Muchas veces no somos conscientes de una emoción hasta que nos desborda. Por tanto aprender a reconocer una respiración alterada será como esa alarma que nos avise y nos haga conscientes de lo que está pasando en nuestro cuerpo y en nuestra mente.
Te enlazo un podcast para que empieces a practicarla AQUÍ
Espero que te haya servido de ayuda. Si tienes alguna duda deja un comentario e intentaré resolverla.